lunes, 18 de julio de 2011

BOLIVIA: Generismo: Pura inclusión pura

Género ahora es un concepto resignificado, luce interclasista y universal. Apenas roza la dominación y suena a que "nos dejen entrar, por favor"... 

...Así, las revoluciones, las guerras civiles, las batallas por los recursos naturales, las luchas antidictatoriales en las que, a menudo, mujeres feministas, anarquistas, anticlericales y otras, no conciliaron con el sistema se niegan y en su lugar se nos propone una suave dominación…

Otro cuento para el Género en Cochabamba, Bolivia

Si no hubiese sido por las chicas que estaban empeñadas en acompañar a mujeres que se atrevían a denunciar, y que le proponían hablar de sus dolores para sanarlos, ella habría estado completamente sola con su cuerpo adolorido. Se sentía culpable por haberse aventurado a ese lugar. Se sentía culpable por no estar llorando a gritos… En vez de eso iba con los ojos abiertos y secos… Hubiera querido dormir, pero ellas le habían dicho: ¡Vamos, Marina, esto no puede seguir pasando más!

La asistente social del Hospital subrayó que debía entrar “ella sola”.

- ¡Qué andabas haciendo en ese lugar…!... - le dijo severa desde detrás de su escritorio.
Marina temblaba, retrocedió unos pasos, quiso correr, pero no pudo. Era el mismo miedo de cuando el hombre le colocó un cuchillo en el cuello… La mujer le ordenó sentarse.
 
- ¿Cómo fue? – Anotaba en su computador- ¿Estaba solo o acompañado?...
 
…Habían venido otros, pero la había violado solo… ¿O no?... Le pareció oírlos reír, pero tal vez fuese el asco… Marina no se atrevió a afirmar nada, se sentía confusa. La mujer frunció el seño con desaprobación…
 
Al otro día, la abogada de la Institución Para la Mujer le agradeció que viniese sola. Le entregó un formulario de la Fiscalía y le aclaró que no quería que el grupo que la acompañaba se apareciera por su oficina. Ella era “licenciada” y no necesitaba la intervención de unas feministas… Marina respondió el formulario y se lo devolvió en silencio. Se fue a su cuarto y durmió y si no hubiera sido por las chicas habría dormido para siempre…
 
El Servicio de Salud y la Institución Para la Mujer eran programas con “enfoque de género”. 

Inclusión

Se ha transformado en una suerte de penetración institucional. Algo así como un gran falo que a veces hiere, otras veces nos trata con indiferencia, y generalmente, se presenta como si estuviera de nuestra parte. Hablo del generismo.

Es cosa de conocer grupos de mujeres, mixtos, de jóvenes, integrantes de organizaciones sociales, trabajadores de ministerios, trabajadores de instituciones tipo o­nGs, para darse cuenta que toda esta moda generista, en el discurso cotidiano de técnicos, profesionales y gente organizada social y/o políticamente, se transformó en una maraña de ideas inconexas y funcionales al patriarcado…

Muchas compañeras y compañeros, han pasado cursos sobre Género, Ciudadanía, Mujeres, Empoderamiento de las mujeres… seminarios, talleres, han ido a charlas… Una y otra vez, pero a menudo imaginan “el género” como una consecuencia del sexo anatómico: “Es ser Hombre y ser Mujer”. También -especialmente mujeres- mencionan conceptos como “Igualdad de Oportunidades” y “Equidad de Género”, y los definen como que las mujeres y los hombres tengan la misma participación en TODO y que se distribuya TODO equitativamente. Dicen que “género” se trataría de hombre y mujer, y por lo tanto al impulsar una campaña por los “derechos reproductivos” (por ejemplo), se debería incluir también los derechos reproductivos de los hombres. 

Algunos hombres con la idea de la “equidad”, llegan más lejos: Grupos de SÓLO mujeres sería separatismo y divisionismo político. Y aquello de programas, planes, talleres, seminarios, cursos, políticas públicas para SÓLO mujeres, sería algo discriminatorio: estaría contraviniendo la “igualdad de género”, discriminando a los hombres... 

Es decir, quedamos donde mismo empezamos: Se niega o no se alcanza a ver la asimetría estructural en la constitución de las relaciones entre mujeres y hombres. Se alega que los hombres también son víctimas del sistema… El “sistema” entonces, aparece como algo abstracto, sin responsabilidades políticas. También en estas discusiones, algunas personas que se han capacitado en género y han elaborado proyectos “con perspectiva de género”, llegan a menudo a la conclusión de que si hay algún responsable de la “discriminación de género”, somos las propias mujeres porque las mujeres son más machistas que los hombres y las madres son las culpables del machismo

Otras veces, cuando se reconoce una asimetría relativa entre hombres y mujeres, la propuesta es impulsar algunas políticas especiales para las mujeres. Sobre todo, políticas que se sitúen en el ámbito de la familia, la empresa y la alta política, para que madres de familia, mujeres empobrecidas (denominadas, a veces, “microempresarias”), y mujeres políticas, puedan equilibrar el mundo público con su mundo privado. Que no tengan que dejar de lado la familia, el matrimonio, la maternidad y puedan, A LA VEZ, participar en el mundo que hasta ahora, ha sido de los hombres. Que puedan incluirse.

Complementariedad

Muchos, especialmente hombres, hablan de la complementariedad hombre-mujer como una manifestación de la equidad de género. La idea básica es: hay dos géneros: “hombre y mujer”, sería lo mismo mujer que femenino y roles femeninos, y sería lo mismo hombre que masculino y roles masculinos. Así, la sexualidad heterosexual sería la “normal”, la verdadera, la natural, y por lo tanto la unidad básica de la sociedad sería la pareja heterosexual. En esta mirada, cuando hombre o mujer están sin pareja, no serían seres completos. Para estar completos habría que acceder al matrimonio con el otro género y conformar la pareja heterosexual políticamente correcta.

Cuando comenzamos a mirar cómo se da la complementariedad en comunidades que conocen las y los asistentes a estos talleres, descubrimos en las experiencias relatadas que las autoridades son hombres, y que sus esposas deben acompañarlos en este rol de manera femenina: secundar, secretariar, apoyar, colocar las bases domésticas para que su marido pueda actuar en lo público. Ellas son el complemento de ellos en cuidados y apoyo para que así ellos puedan hacer el ejercicio político masculino. En esta idea política, la complementariedad es heterosexual en términos de prácticas sexuales y también sensuales y eróticas. Se trata de matrimonio y sexo hetero, y por lo tanto no hay lugar para otras prácticas sexuales, para otro ejercicio del sexo, el erotismo y el amor, que no sea entre hombre y mujer. Las lesbianas, los homosexuales, los trans no encajan en la complementariedad. 

En alguna ocasión, nos ha relatado un compañero homosexual de una comunidad rural, que a él le tocaba ser autoridad porque su padre lo era, y que luego de mucho deliberar su comunidad aceptó que no fuese casado y su madre pasó a jugar el rol femenino complementario… 

¿Qué espacio tendrá una lesbiana en este orden político establecido? 

Una joven rebelde hace poco dijo que, en su opinión, podrían complementarse mujer con mujer u hombre con hombre… Sonó como una herejía en la sala de nuestro taller. Había algunos indianistas y no podían creer lo que estaban escuchando. ¿Si llegasen dos hombres a ser pareja y autoridades en una comunidad... uno ejercería el poder político comunitario y el otro haría los roles complementarios de apoyo femenino? Es decir: ¿Se trataría de una distribución asimétrica nuevamente, pero ahora entre dos individuos del mismo sexo genital y entonces, uno encajaría en el rol masculino –el activo políticamente- y el otro en el rol femenino –el complementario-?

Sería, al parecer, la repetición del modelo de normalidad heterosexual –patriarcal-. 

Y si pensamos en dos mujeres, imaginamos lo mismo, aunque hay un impedimento, no se sabe de mujeres con el rol de autoridad política en alguna de las comunidades conocidas por los y las asistentes.

Excepcionalmente, alguna mujer, a menudo joven - estudiante de disciplinas como Antropología o Sociología- en un grupo de 30 a 40 personas, da una definición docta como “Categoría social relacional que devela la desigualdad entre hombres y mujeres”. Sin embargo, en la conversación política del Taller, sin definiciones de por medio, volvemos a lo mismo: Se trataría del hecho de que las mujeres quieren igualdad con los hombres y participar, especialmente en lo político. También buscarían compartir los roles domésticos y de crianza. Es decir, ya no quisieran jugar un rol complementario en política, y en lo privado, esto se solucionaría con que los hombres cocinen, laven, cuiden a las wawas, tanto como ellas… 

¿Cómo se haría la medición de este cambio a niveles políticos estructurales? ¿Serían las esposas quienes tendrían que dar fe del cambio de los esposos, las madres del cambio de los hijos, las hijas del cambio de los padres…?... 

Reclamos femeninos al machismo

Estas ideas y reflexiones, desatan bastantes contradicciones en los grupos mixtos, especialmente porque contradicen lo que se define como “usos y costumbres”. Colocan un elemento muy conflictivo en la mirada moral de muchos hombres y de algunas mujeres, que se han rebelado contra el hecho de que la cultura blanca y colonial nos exporte a los pueblos de Abya Yala, valores e ideas colonialistas. 

Se observa una molestia evidente en participantes masculinos y por otra parte, muchas mujeres no dan su brazo a torcer con la demanda de obtener más ayuda masculina en la familia ni con su aspiración de actuar en política desde el poder establecido. Entonces explican que lo que quieren son los mismos derechos, y que no por eso dejarán de cumplir con “sus” obligaciones. Solicitan reconocer la dignidad del rol de las mujeres, y asumir una distribución de roles y deberes más justa entre ambos sexos: que se manejen equitativos los roles en el hogar, que se cumplan bien las responsabilidades de madres y padres, y a la vez, se permita el “empoderamiento” de las mujeres… 

O sea, que las mujeres accedan al poder que los hombres han ejercido hasta ahora. Que sean asambleístas, diputadas, senadoras, presidentas. Que todas las mujeres puedan acceder, potencialmente a esos espacios, sin ningún tipo de discriminación. Y justo ahí surge un escollo gigantesco: ¿Acaso no importa de qué intereses de clase, etnia, territorio, sean representantes esas mujeres que van a ejercer el poder? ¿Esas mujeres nos van a representar a las demás? ¿Cómo? ¿Cómo será que garanticen la representación de las negras, las indígenas, las rurales, las lesbianas, las empobrecidas…? ¿Las mujeres políticas en puestos de poder del Estado y/o del poder económico, por ser mujeres, van a ejercer sus cargos de manera más ética que los hombres? ¿Una indígena en el poder garantiza la defensa de los intereses de las indígenas?

Al andar en este camino reflexivo con mujeres y hombres de diversas edades que tendrían “perspectiva de género” –por sus muy numerosas y diversas capacitaciones - y que buscan cambios políticos, entramos en confusiones que parecen trampas. Nos surge la impotencia y rabia de clase, territorial, étnica (a muchos, a muchas, y a mí). También nos topamos con algunos moralismos dignos del Opus Dei, o con la culpabilización misógina implícita en la idea de causa y efecto y en la imagen de provocación femenina del machismo… Y el machismo -ese fenómeno tan básico y ordinario- parece ser lo único que dificultaría el devenir de la vida de las mujeres. 

Institucionalidad universalizadora

Parece muy conveniente para el patriarcado, para el grupo masculino privilegiado y sus instituciones –representadas, en este caso, por muchas o­nGs, organismos estatales, universidades y la Academia en general, y también por entidades económicas-, presentar el “enfoque de género” como una idea escasamente profunda. También sirve mucho a la burguesía, a los Estados en general, a los partidos políticos, a los grupos económicos derechistas, imperialistas y racistas, y a los grupos que monopolizan la moral e imponen la normatividad sexual. 

De hecho, cualquiera de esas instituciones se puede presentar hoy como una institución “con enfoque de género”, y obtener recursos para planes, programas, capacitaciones, en nombre del Género –en nombre de las mujeres-.

Creemos que mayor profundidad en el enfoque de género colocaría una contradicción importante para los enunciados técnicos de las instituciones. Eso por un lado. Pero, las preguntas persisten: ¿Dónde deja el género -como enfoque político- la lucha de clases, la lucha antirracista y anticolonialista? ¿Contiene una denuncia explícita contra la concentración de la riqueza en unas pocas manos? ¿Defiende y propone la desestabilización política y sexual de la heteronormatividad? ¿Por qué se ha mostrado tan funcional al patriarcado? ¿Por qué se lo puede presentar como una mirada universal sobre la realidad de “La Mujer”? ¿Por qué al enseñarlo se lo puede manipular evadiendo el enfoque feminista que revela la asimetría constitutiva, estructural, entre hombres y mujeres como un fenómeno eminentemente político?…

“Empoderamiento”

A todo esto se le agrega la escasa pasión con que algunas expertas generistas exponen el concepto. Y es que, es difícil, sin asumir los costos de ser feminista, comunicar un concepto que podría mostrarlas como mujeres rabiosas culpabilizando a los hombres, como expertas muy radicales que por radicales no van a encajar en contextos institucionales. Puede además dejarlas aisladas de los hombres, quitarles su favor… Y si es hombre el experto, ¿desde dónde habla él? ¿Desde qué experiencia de vida? Puede que sea un hombre burlado por los demás, incluso un paria del poder masculino, pero –igualmente- será un hombre con experiencia de privilegios materiales y simbólicos disponibles para él desde que nació… Tan disponibles que a pesar de su intensión pro feminista puede llegar a preguntarse en alguna ocasión: ¿Qué privilegios masculinos?

Pero desde la mirada del llamado “empoderamiento”, cuando se habla de género, se puede quedar indemne y no ser nada radical. Hablar del poder y el acceso al poder, no es lo mismo que hablar de dominación y colonialismo sobre las mujeres.

El Poder parece una relación fluctuante. Por ejemplo el poder maternal: Se ejerce por las mujeres que lo asumen como una institución y lo replican como algo normalizado configurado con el adultocentrismo: Esa mirada política en que niños, niñas y jóvenes de ambos sexos, entre otras cosas, estarían para el beneficio de las mujeres y los hombres adultos que los engendran y/o los crían, y que serán calificados de “malcriados”, si deciden defenderse o responder con agresión a la agresión explícita o implícita adulta.

La maternidad es además un poder que da credibilidad moral a las mujeres por el sólo hecho de parir, y que puede ejercerse desde los golpes, pasando por amenazas y llegando a sutiles abusos emocionales en los que se les prescribe a jóvenes, niños y niñas, cómo deben vivir y obrar. Pero la vida te da sorpresas. En lo privado lo tienes, te admiran sólo porque eres madre, los representantes de las naciones te nombran en sus discursos, los curas te bendicen, los estados te dan bonos y condecoraciones por parir. Luego, cuando se te ocurre elevar alguna queja antimachista, te recuerdan que las mujeres son las culpables del machismo porque las madres crían a los hombres…

Cuerda floja

Las mujeres tenemos un poder subalterno importante ¿Quién dijo que no? Entre otros poderes está el de la Maternidad -que no es lo mismo que la potencialidad de embarazarnos, parir, criar y amar, potencialidad sobre la que siempre, cada mujer, debería poder decidir-. Pero como institución, la Maternidad -y el maternalismo- está siempre disponible para todas las mujeres adultas, incluso para las que jamás han parido, pero aprendieron con sus propias madres a ejercerlo, y lo replican en otras relaciones personales y públicas. Pero el poder parece un algo muy resbaloso y poco confiable… En el caso del poder maternal, se puede esfumar fácilmente cuando llega el jefe de familia al hogar y en algunas horas que está en casa, define que el orden de la mujer no es el adecuado y lo modifica a su gusto y gana. 

El poder maternal -y maternalista- se puede volver rápido contra nosotras. El mismo registro que nos sirve como pasaporte de bondad en la vida en general, con la intervención de otros, o por nuestra propia responsabilidad, puede transformarnos -a los ojos de los demás- en mujeres neuróticas, crueles, autoritarias, castradoras y dejarnos desautorizadas ante hijos e hijas y ante todo el resto de nuestro entorno. Es como caminar sobre una cuerda floja… Mujeres que lo elijan pueden tomar lo que ha estado disponible en la Familia para ellas como aprendizaje maternal y usarlo en el Congreso, en el partido, en la organización. Dominar sin que se note, presionar suavemente, hacer sentir culpables a quienes no cumplen con sus expectativas, denostar a quienes se rebelan a su autoritarismo, calificar desacuerdos como ataques, amenazar, sentar a alguien que odian en el banquillo de los acusados … y con una nota muy femenina hablar con lenguajes cotidianos para luego legislar a favor de los intereses de la clase política y así obtener la aprobación masculina que será la que asegure la permanencia de estas mujeres en el poder… Pero ojo, un sólo paso en falso, y al vacío.

Y no es sólo la maternidad, también está el poder de la seducción sensual: Manejar nuestra apariencia y las formas de acercamiento para obtener la atención masculina. Pero este poder tiene una vida muy corta –no como la maternidad, siempre disponible-. La edad lo desvaloriza, y ante todo, el dominio masculino lo arrasa con abusos que luego justificará con la misma seducción y con aquello de: “Ella provocó”.

El Poder puede ser autoridad, estatus social, prestigio, fuerza física o simbólica. Hoy lo tienes, mañana no. Un tira y afloje. Hoy te alaban, mañana te bajan porque diste un paso en falso o porque apareció otra figura más connotada, prestigiosa, maternal, brillante. 

Aquello de que la asimetría que existe en el acceso y el ejercicio del poder en detrimento de las mujeres, sería razón para la necesidad del empoderamiento de éstas, quienes, supuestamente, ya empoderadas, romperían con las desigualdades impuestas, es una afirmación, al menos, superficial. Y no explica por qué tantas mujeres querrían incluirse en el poder establecido, cómo resolverían las demandas de las mujeres (universalmente hablando) y especialmente, cómo desarmarían la estructura que nos oprime y se apropia de nosotras, las mujeres, como seres pertenecientes a la Familia, al Estado y a los hombres. 

El problema del poder parece apenas rozar el de la estructura de dominación en la que incluso las mujeres que acceden a la clase política no dejan de ser subordinadas al patriarcado. 

“Equidad”

Los conceptos no son desligados de su uso político y la historia de ese uso político. El concepto de “Equidad”, según el BID -que traslada conceptos del mercado a las políticas públicas- forma parte de un cuadrilátero de oferta y demanda que incluye Eficacia, Eficiencia y Sostenibilidad, además de la propia Equidad. A su vez, se dice, que la Equidad, respondería a 3 principios básicos: “Igualdad”, “Cumplimiento de Derechos” y “Justicia”1

Preguntamos: ¿Igualdad con respecto a quién? y ¿por qué es ese el modelo a igualar?, ¿qué tipo de igualdad?, ¿en qué aspectos? ¿”Justicia” según quién? y finalmente: ¿Qué derechos?, ¿los ya consagrados en la lógica patriarcal? Por ejemplo ¿el manoseado derecho a la vida que arrebata a las mujeres la decisión sobre su potencialidad de parir o abortar? 

El de la “Equidad”, de acuerdo a su uso político, es el relato liberal de los Derechos Humanos que parte con la presunción –falsa- de igualdad o de necesidad de “igualar” a individuos, grupos sociales, comunidades y pueblos, acercándolos al acceso que tienen las clases dominantes. Sólo acercarlos: Nada de redistribuir la riqueza quitándola de las manos de unos pocos y entregándola a todos y todas. Así, los empobrecidos, la mujeres -más pobres que los hombres pobres-, las negras, las indias, las lesbianas más rechazadas e invisibilizadas que los homosexuales, los homosexuales, serían igualados con individuos de los grupos de poder, a través de leyes, financiamientos, cuotas políticas, cupos de poder, reconocimiento de su folclor, tolerancia a sus prácticas sexuales, incluso derechos como el matrimonio. 

Es la inclusión en todo sentido: incluirnos en el Patriarcado. (Y entre otras medidas parche, la inclusión de su fenotipo por ejemplo en los anuncios comerciales, en la industria de la moda, en los concursos de belleza, etcétera). 

Se supone que las negociaciones entre los excluidos y los incluidos entonces, darían lugar a esa igualación… Negociaciones que son, en nuestra comprensión, una parte fundamental del llamado “empoderamiento”. 

Hay definiciones formales de Equidad: “Atribuir a cada uno, aquello a lo que tiene derecho”, también sería justicia natural por oposición a la justicia legal. Ninguna nos beneficia. Los grupos empobrecidos en los territorios subdesarrollados tendrían derecho a una vida en consecuencia (una vida pobre y colonizada); y la justicia natural podría ser la de Dios, o la de la Naturaleza, que en el relato biológico es esencialista y por ende heteronormativo y opuesto a la justicia legal, que mal que mal, es una construcción social. 

Pero más allá de esa discusión que podría tornarse muy abstracta, los pragmáticos de la “Equidad” plantean que ésta tendría un reconocimiento universal que serviría de pauta o estándar para las políticas públicas. Ahí comienzan técnicamente a discriminar entre “equidad vertical” y “equidad horizontal”. La “vertical” sería un tratamiento a todos por igual y la “horizontal”, un tratamiento diferenciado. La interpretación más frecuente de “Equidad”, dicen, es “Igualdad de Oportunidades”, y es en ese sentido es que se traslada al campo social. Significaría “Igualdad de Oportunidades” a toda la población, independiente de la clase, género, territorio, etnia, capacidad de pago… Y nombran “capacidad de pago” porque en realidad estamos hablando de OFERTA de “servicios”, “información” o de algún otro objeto de políticas públicas. Es una oferta universal -o “cobertura”- homogénea de servicios sociales. El énfasis para las mujeres es en la condición de la mujer, su estado material, su pobreza, su carga de trabajo, su falta de acceso a la tecnología. Nada –claro está- en relación a la posición estructural de las mujeres. 

Cuando hablan de “Equidad” -los que saben- hablan de mercado. Por eso la “Equidad horizontal” es más realista, y crea “coberturas” diferenciadas de acuerdo a la clase por ejemplo. En este plano es que se manejan las ideas de “Igualdad de Acceso” e “Igualdad de insumos”. El mercado sabe que la burguesía no necesita “acceso”. Es entonces “Equidad horizontal” focalizada en los pobres

Gobernabilidad e Inclusión
 
Los términos, los conceptos, las palabras no son malas en sí mismas. Pero tienen una historia sobre el uso político que se les da. Esto de la “inclusión” se asocia a lo de la “Exclusión social”, concepto que se le atribuye a René Lenoir, Secretario de Estado de Acción Social en el gobierno de Chirac, con su libro Les exclus: un Français sur Dix, publicado en 1974. 

Y si es así, coincide con la idea de la “lucha contra la pobreza” que el Banco Mundial y el gobierno de EE.UU. colocaron de moda en los años 80. Se trataba de introducir la “Equidad” como discurso social para aminorar la amenaza de que los pobres estallaran en rebeliones en América Latina y El Caribe. Y la “Equidad” iba acompañada de los “Ajustes Estructurales”. Y es que, “el problema” para el Banco Mundial es “la pobreza”, muy distinto a nuestro problema: la distribución injusta de la riqueza en las manos de unos pocos (Zibechi 2010). El Banco Mundial entiende que los intolerantes empobrecidospueden desestabilizar el sistema con revueltas. Para evitar esto hay que incluirnos (o hacernos fantasear con que seremos “incluidos”). Parte de la misma lógica política pinochetista en los mismos años 80: el discurso del “chorreo”: Las cifras macroeconómicas iban a ser tan altas, que a los pobres nos iba a chorrear dinero desde arriba -desde los ricos-, sólo había que esperar abajo, en los barrios populares y en el campo, a que nos llegara algo...
 
Así se fue fraguando aquello del “Alivio de la pobreza” que permitiría la gobernabilidad, y para fortalecer la gobernabilidad sirvieron las o­nGs. Por eso se reprodujeron como hongos en nuestro continente. Les dieron mucha plata para asegurarse de que estas instituciones hicieran dormir los ánimos de rebelión de los pueblos gracias a sus proyectos de “Equidad” e “Igualdad de Oportunidades” para pobres

En Bolivia, país prioritario para la “Cooperación” –por sus recursos naturales tan codiciados- de haber 100 o­nGs en 1980, pasaron a competir 530 en 1992 -como explica Raúl Zibechi en su libro “Contrainsurgencia y Miseria”-. Para conseguir la plata se profesionalizaron, institucionalizaron y organizaron la tecnocracia social apoyando a la vez el imperialismo blando2

Algunas mujeres de o­nGs comenzaron a hablar incluso de “humanizar” el capitalismo. Fue por el tiempo en que Pierre Galand, Ex secretario general del OXFAM-BELGICA y ex integrante del grupo de trabajo de las o­nG del Banco Mundial, renunció públicamente a las o­nGs y escribió su carta: “Renuncio, No quiero ser cómplice”, explicando -entre otras- cosas que el Banco Mundial se había apropiado del discurso de las o­nGs y a la vez imponía una política económica que dejaba a los países pobres “indefensos en manos del dominio del mercado mundial”3.

“Equidad”, “Equidad de Género”, “Igualdad de Oportunidades”, “Empoderamiento” son conceptos emparentados con “Gobernabilidad”, “Alivio de la Pobreza”, “Combate a la Pobreza”. Se trata de “inclusión” en el contexto de la dominación estructural de las mujeres y los pueblos empobrecidos. Creemos que esto se enlaza estrechamente con las complicidades masculinas interclasistas para someter a las mujeres y así apropiarse de sus cuerpos, su reproducción, su producción y su fuerza de trabajo. Instituciones económicas y políticas por medio del generismo impulsan estas políticas en todo el continente. Es una nueva manera de evitar la destrucción del patriarcado y de su hijo pródigo: el neoliberalismo. Otra chance para atrasar revoluciones.
 
Victoria Aldunate Morales
Feminista autónoma latinoamericana
Asamblea del Feminismo Comunitario, Bolivia

1. MOKATE, KAREN. "Diseño y gerencia de políticas y programas sociales". Banco Interamericano de Desarrollo, Instituto Interamericano para el Desarrollo Social (INDES), junio 2000. Es importante subrayar que el BID a diferencia del Banco Mundial, no se vincula con o­nGs, si no más bien con gobiernos y estados. En Perú por ejemplo, ha apoyado junto con el FMI en los años 90 un llamado Plan de Estabilización Social: gasto “más eficiente y efectivo” en infraestructura y servicios “a través de intervenciones focalizadas y acuerdos de participación institucional”.

2. ZIBECHI, RAÚL. “Contrainsurgencia y miseria. Las políticas de combate a la pobreza en América Latina”. Ed. Pez en el árbol, 2010. 

3. MINÁ, GIANNI. “Un continente desaparecido”. Ed Sperling y Kufer, 1996 – libro en el que se cita la Carta de renuncia de Pierre Galand -ex secretario general del OXFAM-Bélgica del grupo de trabajo de los organismos no gubernamentales del Banco Mundial - Ver también “Sobre Autonomías” de Victoria Aldunate Morales: http://lahaine.org/b2-img09/victoria2.pdf


México: Violencia política contra mujeres indígenas en Chiapas: Desalojos y represión

Comunicado sobre los hechos, solicitudes y demandas propias de un género cansado de sufrir. Un llamado desde la mujer a todos los responsables de estos ataques a la dignidad.

http://www.kaosenlared.net/noticia/mexico-violencia-politica-contra-mujeres-indigenas-chiapas-desalojos-r

A las Mujeres de México y del Mundo,
Al Gobierno Estatal y Federal,
A los Organismos de Derechos Humanos.


En el contexto nacional de una creciente violencia contra las mujeres, marcado por el aumento de feminicidios y el hostigamiento a familiares de personas desaparecidas y asesinadas por la supuesta lucha contra el crimen organizado, en el estado de Chiapas la violencia política contra mujeres indígenas se está viendo igualmente reforzada más allá de los discursos oficiales y el anuncio de presupuestos destinados a políticas públicas que supuestamente defienden los derechos de las mujeres.

Ante los hechos que exponemos a continuación, mujeres organizadas y defensoras de los derechos de las mujeres denunciamos la represión, violencia e impunidad que sufren mujeres y población infantil de la Ranchería Las Conchitas, Municipio Salto de Agua, Chiapas.

Hechos:

El lunes 4 de julio del año en curso, siendo aproximadamente las 12 de la madrugada, familias asentadas en la Ranchería Las Conchitas, municipio de Salto de Agua, fueron asaltadas en sus hogares por un grupo armado compuesto por ocho individuos, quienes los retuvieron haciéndolos objeto de tortura física y sicológica. Siendo afectadas las compañeras: Candelaria Jiménez Pérez, Magdalena Pérez López, Utina Vázquez López, Ana Álvarez Martínez y Migdalia Martínez Jiménez con sus 23 niños-niñas presentes, así como los compañeros: Domingo Pérez Gómez, Pedro Pérez Pérez, Mateo Pérez Pérez, Pablo Pérez Pérez y el joven Wilmar Martínez Jiménez.

Los agresores, cubiertos con pasamontañas, se auto-identificaron como “zapatistas”, señalando en sus conversaciones a uno de ellos como “el comandante”. Por espacio de tres horas estos sujetos mantuvieron maniatados a los esposos de las mujeres de la ranchería, sojuzgándolos mediante culatazos de sus armas y golpes de una cadena que portaban. Las mujeres, quienes en un primer momento y mientras sus esposos eran sometidos, intentaron huir hacia las montañas colindantes, fueron igualmente retenidas y encerradas en sus propias casas, obligándolas a presenciar los golpes, insultos y amenazas de los que eran objeto sus esposos.
Posteriormente, llegadas las 3 de la madrugada, hombres y mujeres fueron obligados a desalojar sus viviendas, sin permitirles llevarse nada consigo, manteniéndolos bajo continuo amedrentamiento mediante amenazas de muerte del tipo: “…y si regresan los vamos a matar”. Bajo la vigilancia de sus agresores fueron traslados a las inmediaciones de la Ranchería El Palmar, en donde tras golpear nuevamente a los hombres, fueron liberados.

Mujeres y hombres agredidos recibieron la inmediata solidaridad y apoyo de las mujeres de la comunidad de El Palmar, quienes de manera inmediata se organizaron para ofrecerles atención, así como alojamiento y comida, especialmente para los 23 niños y niñas que conformaban el grupo.

Al tener la información vía telefónica de estos hechos, monitoras de derechos humanos y jóvenes indígenas del Colectivo Rosa Luxemburgo, junto con la coordinadora del área de derechos humanos de la asociación civil K´inal Antsetik nos trasladamos a la Ranchería El Palmar para recoger los testimonios de las mujeres, población infantil y esposos víctimas de la referida agresión.

El día 6 de julio, aproximadamente a las 16:00 pm nos trasladamos con las mujeres víctima de esta agresión ante la Fiscalía del Distrito Selva del Ministerio Público (segundo turno), siendo atendidas por el Lic. Mariano Moreno Jiménez, quien en un tono despectivo, prepotente e insensible hacia la situación de las mujeres con quienes habíamos hecho un largo trayecto para ser atendidas como corresponde en Derecho, nos conminó a regresar al día siguiente, haciendo dejación de sus funciones como servidor público y soslayando la gravedad y urgencia de la denuncia que pretendíamos incoar.

Con el propósito de instar la actuación de las diferentes autoridades públicas competentes, se mantuvo con posterioridad a la visita a la Fiscalía, una breve reunión con el Delegado de Gobierno del Municipio de Tila, a la que acudieron en representación de las víctimas de la agresión, la señora Candelaria Jiménez Pérez y Don Domingo Pérez, así como un representante de la organización popular a la que estas familias pertenecen, el Frente Nacional de Lucha por el Socialismo (FNLS). La actitud del delegado fue en todo momento de indiferencia hacia la situación de las familias desplazadas, manifestando en un tono prepotente su nula voluntad de intervenir en la situación en busca del otorgamiento de la regularización de sus tierras a los ahora desplazados.

Exigimos al Gobierno del Estado de Chiapas y demás autoridades públicas:

1. Ofrezcan garantías reales para el retorno de las familias desplazadas de la Ranchería “Las Conchitas”.

2. Estricto respeto a los derechos de las mujeres y de la población infantil desplazada. No basta con que el Consejo Estatal de Derechos Humanos haya acudido a recabar los testimonios de las mujeres víctimas de agresión y desalojo, mostrándose insensible a las urgentes necesidades de mujeres y niños desplazados. Este Consejo debe garantizar la seguridad y el respeto a los derechos de las mujeres en casos de desplazamiento forzado y en todo acto donde se violen los derechos de las mujeres.

3. La resolución de este conflicto agrario, donde como en otros casos las mujeres y la población infantil son víctimas de omisiones gubernamentales, cuando no de los intereses políticos existentes en torno a la privatización de tierras ejidales o comunales. Exigimos que la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (PROFEPA) y la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (CONANP), asuma su responsabilidad correspondiente frente a estos hechos y resuelva el conflicto agrario.

4. Que los Ministerios Públicos competentes en el caso garanticen la atención inmediata a mujeres que han sufrido algún tipo de violencia sea cual fuere.

5. Un alto a este modelo de uso de la violencia patriarcal, donde operan grupos armados aliados del gobierno estatal y federal.

Solicitamos:

6. A los Centros de Derechos Humanos, el mantener una actitud de carácter independiente, siendo imparciales en el abordaje y resolución de este tipo de conflictos, velando en todo momento y de manera consciente por el respeto a los derechos de las mujeres y la población infantil cuyos derechos se han visto vulnerados en este caso.

7. Al EZLN, se deslinde de esta agresión, perpetrada por individuos que manifestaban pertenecer al mismo, pues no creemos que esta manera de operar sea propia de su deseo de una paz digna y justa para todo México y para las mujeres indígenas.

8. A las organizaciones de mujeres y a la población en general, su apoyo y solidaridad para con las mujeres y niños desplazados, quienes aún siguen hacinados en la ranchería El Palmar, viviendo en condiciones inhumanas.

Como mujeres organizadas estamos hartas de ser usadas como botín de guerra en conflictos agrarios donde se yuxtaponen los intereses de empresas privadas e instituciones del gobierno federal y estatal, quienes pretenden llevar a cabo despojos de tierra para implementar sus planes neoliberales.

Los desplazamientos son síntoma de la manera prepotente e impune en que se ejerce el poder en este sistema capitalista y patriarcal. Existe una total falta de derechos efectivos frente al abuso y autoritarismo de quienes dicen defender los derechos humanos de las mujeres.

Hacemos responsable al gobierno estatal y federal de todas aquellas situaciones que puedan generarse como consecuencia de su omisiva o negligente respuesta a este caso, fruto de su hasta ahora inexistente voluntad política por resolver el conflicto a tiempo.

FRATERNALMENTE

Colectivo de Mujeres Rosa Luxemburgo-FNLS
Área de Derechos Humanos de K’inal Antsetik

sábado, 9 de julio de 2011

Las presas políticas palestinas y la lucha por la libertad

Reham Alhelsi
http://www.rebelion.org/noticia.php?id=111796
Traducido del inglés para Rebelión por Beatriz Morales Bastos

Las mujeres palestinas siempre ha estado al lado de sus padres, hermanos, maridos y camaradas para resistir a la ocupación sionista, para luchar por la libertad y sus derechos legítimos. Son las primeras en salir a la calle para protestar por la brutalidad de la ocupación militar israelí, las primeras en organizar sentadas y manifestaciones para exigir que liberen de las cárceles israelíes a sus hijos, hermanos y padres. Son quienes protegen, quienes apoyan, pero la mayoría de ellas son las compañeras en la lucha por una Palestina libre. Protegen a sus hijos, padres, hermanos y maridos del invasor sionista venido a secuestrarlos, pegarlos o asesinarlos. Mantienen a sus familias cuando sus padres, hermanos o maridos son encarcelados o asesinados por las terroristas tropas israelíes. Ellas abrazan a la tierra y besan a los olivos. Preparan el terreno para la resistencia y le dan forma con su sangre. Ellas son la firmeza del olivo ante los usurpadores de Nablus, Jenín, Belén y Al-Jalil. Ellas son las amapolas que engalanan las colinas de Jerusalén, Hebrón y Safad. Ellas on las mariposas que besan los campos de Hebrón, Jenín y Bisan. Ellas son la brisa fresca de Haifa, Yaffa, Acca y Gaza. Ellas son la piedra, poderosa, fuerte y que sólo abandona el suelo para golpear al usurpador en la cara. Ellas son las hijas de Palestina, audaces, firmes y pacientes. Son las madres, hermanas, hijas y compañeras de los mártires, de los que luchan por la libertad y de los presos. Ellas son las mártires, las que luchan por la libertad y las presas. Ellas son las guardianas de la revolución y el símbolo de firmeza. Ellas son Palestina abrazando a sus hijos e hijas, protegiéndolos y guiándolos. Desde 1967 la entidad sionista ha detenido a más de 800.000 palestinos, incluyendo a 15.000 mujeres. Durante la primera Intifada, fueron detenidas 3.000 mujeres y durante la Intifada de al-Aqsa más de 900 mujeres fueron encerradas tras los barrotes israelíes. A diario hay redadas y detenciones. Las personas detenidas a veces son liberadas al cabo de unos pocos días, otras veces al cabo de unas pocas semanas o permanecen detenidas indefinidamente. Sólo en junio de 2010 fueron detenidos unos 334 palestinos, incluyendo 4 mujeres. Actualmente hay 36 presas palestinas en la cárceles israelíes de Damon, HaSharon y Neve Tirza: 4 de Jerusalén, 3 de la zona palestina ocupada en 1948, 28 de Cisjordania y 1 de la Franja de Gaza. Seis de las presas están en espera de juicio, tres están en detención administrativa* y 27 han sido condenadas, cinco de ellas a cadena perpetua.
 
Al igual que sus compañeros de detención, las presas palestinas padecen la brutalidad de las autoridades penitenciarias israelíes. Están expuestas a abusos, a humillaciones y sujetas a más de veinte formas de violación. Son torturadas, golpeadas, hostigadas, insultadas, atadas durante horas bajo el ardiente sol o bajo la lluvia, son privadas del sueño, aisladas, se les imponen duras multas sin razón, están sometidas al continuo uso de gases lacrimógenos en las celdas, se les niega continuamente los permisos de visitas familiares y las llamadas, y las cartas se envían o distribuyen sólo cada tres meses. También son sometidas a duros y humillantes incursiones nocturnas y a cacheos. El 24 de junio de 2010 las fuerzas israelíes especiales (Golan) en la cárcel de Damon irrumpieron en las celdas de las presas palestinas temprano por la mañana, atacaron a las presas, hicieron registros en las celdas y las obligaron a desnudarse, a sentarse en cuclillas en posturas humillantes durante cuatro horas bajo el pretexto de una inspección. Además, las Autoridades Penitenciarias israelíes prohíben a las presas adquirir más de un libro, no les dejan enviar o recibir ningún bordado o revistas, y deciden el número de prendas de vestir que puede tener cada presa. Las celdas son pequeñas, están abarrotadas, son húmedas, faltas de higiene, no entra ni el sol ni el aire fresco y están infestadas de insectos y ratones. Son frías en invierno y calientes en verano. Como no se permite a las presas recibir ningún artículo de sus familiares, se ven obligadas a comprarlos en las cantinas cuando los necesitan. El agua está muy sucia y es imbebible, y la comida incomible, con lo que las presas se ven obligadas a comprar la comida y la bebida en la cantina de la cárcel a precios muy altos. Los precios no sólo son altos sino que además las cantinas carecen de muchos artículos que necesitan las presas. Algunos presos políticos están encerrados con criminales israelíes que abusan regularmente de ellos mientras observan los carceleros. Un método de castigo empleado por las autoridades penitenciarias israelíes es reducir el tiempo de la visita familiar de 45 a 15 minutos, o cancelar todas las visitas a pesar de las dificultades que tienen las familias para llegar a las cárceles. Du’a’ Al-Jayyousi de Tulkarim fue detenida en 2002. No se permite a su único hermano visitarla y cuando él se casó, las autoridades penitenciarias le negaron el permiso para llamarlo por teléfono.

Los principales problemas a los que se enfrentan las presas son el aislamiento y la negligencia médica. Por el menor motivo son castigadas con el aislamiento y algunas presas han estado sometidas más de una vez al confinamiento en solitario, como Latifa Abu Thra’, Abeer Amro, Abeer Odeh, Amnah Muna y Mariam Tarabeen. El 3 de marzo de 2003 las autoridades penitenciarias israelíes condenaron a seis presas palestinas a confinamiento en solitario porque habían pedido a las autoridades penitenciarias que les proporcionaran agua caliente para bañarse durante la estación fría. Latifa Abu Thra’ fue aislada más de una vez después de que las autoridades penitenciarias israelíes “anunciaran” en 2007 que era “peligrosa para la seguridad del Estado de Israel”. Padece fibras en el útero y le iban a realizar unas pruebas médicas, pero como tenía los pies y las manos encadenadas, la enfermera no pudo hacerlas. Cuando la mujer policía que la acompañaba se negó a desatarle los brazos, ella misma se desató, tras lo cual los guardias de la prisión la atacaron y calificaron de “peligrosa”. Posteriormente la castigaron a confinamiento en solitario durante dos meses y diez días en la cárcel de Ramle, después de lo cual volvió a la cárcel de Hasharon donde fue aislada. No recibió ningún tratamiento médico. En otra ocasión, Abu Thra’ vio como las fuerzas especiales israelíes para la “Represión de prisioneros” golpeaban a Sanabil Breek de Nablus. Cuando Abu Thra’ les dijo que dejaran de pegarla, las fuerzas especiales empezaron a pegarla a ella. Se defendió y golpeó a uno de ello. Fue castigada a cuatro meses de aislamiento en la cárcel de Ramleh y a otros dos en la de Hasharon en una celda diminuta en la que las cámaras la observaban las 24 horas del día. La presa palestina Nili As-Safadi fue encerrada en una celda de aislamiento durante más de 45 días en el centro de detención israelí de Bet Hatikva. La celda era oscura, no recibió una alimentación adecuada ni se le permitió cambiarse de ropa durante todo el tiempo que estuvo en aislamiento. Durante los interrogatorios fue sometida a todo tipo de torturas psicológica y física para obligarla a confesar. Como no confesó, detuvieron a toda su familia y a la de su marido. Después la trasladaron a la cárcel de Hasharon en un viaje que duró 12 horas con las manos y piernas atadas, y durante el cual no le dieron ni comida ni bebida.

Como a todos los presos palestinos en las cárceles israelíes, a las presas palestinas que necesitan tratamiento médico se les niegan los cuidados médicos apropiados y que necesitan mucho. Son constantes los retrasos a la hora de recibir los tratamientos. A las presas palestinas sólo les permite ver a un médico de cabecera y no a especialistas, y a menudo sólo cuando su estado se deteriora. En los casos en que las organizaciones de derechos humanos mandan a un médico para examinar a las presas enfermas, las autoridades penitenciarias israelíes retrasan la concesión del permiso necesario poniendo obstáculos. La presa debe solicitar una “autorización de seguridad” para que el médico pueda entrar en la cárcel y esto puede costar más de seis meses, durante los cuales la salud de la presa se puede deteriorar. Si se concede la autorización, las organizaciones humanitarias tiene que solicitar un permiso para que el médico o la médica pueda ver a la presa. En caso de que le concedan la autorización para examinar a la presa, no puede extender ninguna receta médica. 

Las autoridades penitenciarias israelíes también chantajean a las presas palestinas, por ejemplo, pidieron a Amnah Muna, que necesita una operación, que firmara un documento en el que rechaza el tratamiento médico a cambio de no ser aislada. Amal Jum’a, del campo de refugiados de Askar, estuvo sangrando durante seis meses, después de lo cual descubrieron que era un cáncer de útero. Las autoridades penitenciarias israelíes "le denegaron el tratamiento médico necesario y no se le concedió una camilla. Esto significó que otras presas tenían que llevarla a la espalda para moverla de un sitio a otro porque de había deteriorado tan dramáticamente que ya no podía moverse" [1]. Cuando finalmente fue operada en la cárcel para extirparle el útero una asociación de presos palestinos le envió un médico privado debido a la poca atención médica que estaba recibiendo de las autoridades penitenciarias israelíes.

Las presas palestinas también tienen que dar a luz en condiciones inhumanas. Sólo durante la Intifada de al-Aqsa Intifada no menos de cuatro persas palestinas fueron obligadas a dar a luz en el hospital de la prisión israelí con las manos y piernas atadas, como Mirvat Taha, Manal Ghanim, Samar Sbeih y Fatima Az-Ziq. No recibieron un tratamiento médico adecuado antes, durante y después de dar a luz y no se les permitió tener a familiares a su lado mientras estuvieron en el hospital de la cárcel. Actualmente, al menos 14 presas palestinas necesitan tratamiento médico urgente:[2]

1 Abeer Amro, de Hebrón, padece dolor de espalda, alergia de la piel y una grave perdida de peso. 2 Wurud Qasim, de At-Tira, padece inflamación de las amígdalas. 3 Sumoud Karajeh, de Ramala, padece graves problemas y dolores dentales. 4 Su’ad Nazzal, de Qalqilia, padece rotura de mandíbula e inflamación de las encías. 5 Iman Ghazzawi, de Tulkarim, padece reumatismo, artritis y alergias. 6 Latifa Abu Thra’, de Nablus, padece fibras en el útero. 7 'Aisha 'Ibayyat, de Belén Bethlehem, necesita una operación de mandíbula, padece una inflamación del nervio del oído que amenaza a su capacidad auditiva, y dolor de columna. 8 Wafa’ Al-Bis, de Gaza, padece quemaduras en el 50 % del cuerpo. 9 Raja’ Al-Ghoul, del campo de refugiados de Jenín, padece deficiencias en las arterias cardíacas y tiene dificultades para respirar. 10 Amna Muna, de Jerusalén padece problemas de espalada y necesita una operación. 11 Abeer Odeh, de Tulkarem, padece dolor de pecho. 12 Alia Al-Muhtasib, de Hebrón, está en malas condiciones de salud. 13 Amal Jum’a, del campo de refugiados de Askar, tiene cáncer de útero. 14 Kifah Jibril, de Ramalla, padece una enfermedad rara que le provoca un estrechamiento de las arterias e impide que la sangre fluya a los miembros lo que le provoca dificultades para respirar. Necesita tratamiento médico constante.

La entidad sionista encarcela a las madres, hermanas e hijas, las tortura para obligar a sus familiares a rendirse al ejército israelí de ocupación o para obligar a su familiares encarcelados a confesar lo que no han hecho. Fathiya Swees, una madre de 57 años, fue detenida el 19 de julio de 2010. Su hermana Ikhlas, mujer de un preso, también fue sometida a interrogatorio. Cuando la liberaron el 1 de agosto de 2010, Swees dijo que había sido torturada, que le habían impedido dormir y la habían obligado a permanecer de pie durante horas a pesar de su mal estado de salud. La amenazaron con detener a todas sus hermanas si no daba información.

Durante la primera Intifada y la Intifada de al-Aqsa el ejército israelí hizo frecuentes redadas en las casas palestinas y golpeó a madres e incluso a abuelas, y se las llevó. Se castiga a las madres palestinas que están en la cárcel prohibiéndoles todas las visitas familiares. Al menos siete madres palestinas están actualmente en las prisiones de la entidad sionista:

1 Iman Ghazzawi, de Tulkarem, detenida desde el 8 de marzo de 2001, madre de 2 hijos (condenada a 13 años). 2 Ibtisam Issawi, de Jabal Al-Mukabbir (al oeste de Sawahreh), detenida desde el 24 de octubre de 2001, madre de 6 hijos (condenada a 15 años). 3 Ireena Sarahna, del campo de refugiados de Dheisheh, detenida desde el 23 de mayo de 2002, madre de dos hijos (cadena perpetua). 4 Qahira As-Sa’di, de Jenín, detenida desde el 30 de mayo de 2002, madre de 4 hijos (tres cadenas perpetuas y 30 años). 5 Latifa Abu Thra’, de Nablus, detenida desde el 12 de septiembre de 2003, madre de 7 hijos (condenada a 25 años, en aislamiento). 6 Muntaha At-Tawil, de Ramala, detenida desde el 8 de febrero de 2010, madre de 4 hijos (en detención administrativa) 7 Kifah Jibril, de Ramala, detenida desde el 1 de agosto de 2010, madre de dos hijos (en detención adminsitrativa).

Otras presas palestinas también tienen a sus maridos o hermanos en prisiones israelíes, pero no se les permite visitarlos : Ireena Sarahna (cadena perpetua) y su marido Ibrahim Sarahna (seis cadenas perpetuas), tiene dos hijos. Ahlam At-Tamimi (16 cadenas perpetuas y 20 años) y su marido Nizar At-Tamimi (una cadena perpetua). Iman Ghazzawi (condenada a 13 años) y su marido Shahir 'Asha (condenado a veinte años), tiene dos hijos. Nili As-Safadi y su marido 'Ubada Bilal (condenado a diez años y seis meses). Fatin As-Saadi y su hermano Shafi’ As-Saadi (condenado a cuatro años y medio). Abeer Odeh tiene tres hermanos detenidos por los israelíes: Siddiq en el hospital de la cárcel de Ramleh, Jasir y Saa’di. 'Aisheh Ghneimat tiene dos hermanos detenidos por los israelíes: Mohammad (condenado a siete meses) y Anas (detención administrativa). Shireen Al-'Isawi tiene cuatro hermanos en las cárceles israelíes.

Las historias de los sufrimientos de estos presos, el método brutal de su detención, la tortura psicológica y física durante los interrogatorios y el trato inhumano recibido a manos de sus carceleros y presos comunes israelíes rara vez son objeto de titulares o es siquiera mencionado fuera de la ocupada Palestina. En su mayoría son las páginas web que se ocupan de cuestiones relacionadas con los presos palestinos las que informan de estos abusos y detenciones ilegales y hacen un seguimiento de ello. Un ejemplo es la abogada palestina Shireen Al-’Isawi del Jerusalén ocupado, que fue detenida el 21 de abril de 2010. Los comités de presos palestinos afirman que la detención de Al-'Isawi es un puro acto de venganza y de castigo por su actividad en defensa de los detenidos árabes y palestinos. Trabaja para Defence for Children International (DCI) Sección Palestina, que es una organización de defensa de los derechos de los niños, y está especializada en el seguimiento de los casos de niños detenidos. También es responsable de los casos de algunos dirigentes palestinos presos en cárceles israelíes y de los expedientes de presos jordanos en cárceles israelíes. Pero a pesar de la falta de pruebas y de que los servicios de inteligencia no han logrado hacer que confiese lo que no ha hecho, las autoridades penitenciarias israelies se siguen negando a liberar a Al-'Isawi. Se informó de que en julio de 2010 Al-'Isawi había sido atacada en su celda por presas comunes mientras las autoridades penitenciarias se limitaban a mirar. Actualmente se encuentra en confinamiento en solitario.

Iman Badir Ikhlayyil, de 33 años, originaria de Beit Ummar, fue secuestrada en un checkpoint militar israelí el 20 de junio de 2010, torturada por los soldados israelíes durante los interrogatorios y tuvo que ser llevada dos veces al hospital. Debido a su deteriorado estado de salud, las fuerzas de ocupación israelíes se vieron obligadas a liberarla bajo fianza.

Abeer Odeh from Tulkarim fue secuestrada el 22 de abril de 2006 y detenida durante 28 meses, seguidos de una detención administrativa de nueve meses. Fue liberada a principios de julio de 2009 y el 9 de julio de 2009, cuando se dirigía a Tulkarem, Abeer fue detenida en checkpoint militar israelí, la sacaron del coche, la registraron mientras la apuntaban una docena de rifles y después fue secuestrada apunta de pistola. Ahora se encuentra en aislamiento en una cárcel israelí.

Sanabil Breek de Nablus fue llevada a un tribunal militar y la dejaron atada de pies y manos en una celda del tribunal desde las 8 am hasta 4 pm sin agua ni comida.

Rawan Hasan Thawabteh de Abu Dees fue secuestrada de su casa la medianoche del 8 de agosto de 2010 y desde entonces su familia no sabe dónde está ni a qué centro de detención la han llevado, y a pesar de las preguntas de su abogado las autoridades penitenciarias israelíes se niegan a decir dónde está.

Presas palestinas que están actualmente en cárceles israelíes: 1 Amna Jawad Ali Muna, de Jerusalén, detenida desde 20.01.2001 (cadena perpetua). 2 Abeer Isa Atef Amro, de Hebrón, detained since detenida desde 20.01.2001 (16 años). 3 Iman Mohammad Hasan Ghazzawi, de Tulkarem, detenida desde 08.03.2001, madre de dos hijos (13 años). 4 Ahlam Aref Shihadeh At-Tamimi, de Ramala, detenida desde 14.09.2001 (16 cadenas perpetuas y seis años). 5 Ibtisam Abdel-Hafith Faiz Issawi, de Jabal Al-Mukabbir (al oeste de Sawahreh), detenida desde 24.10.2001, madre de seis hijos (15 años). 6 Lina Ahmad Saleh Jarbuni, de Hebrón, detenida desde 18.04.2002 (17 años). 7 Sana’ Mohammad Hussein Shehadeh, de Qalandia, detenida desde 25.05.2002 (3 cadenasperpetuas y 31 años). 8 Ireena Pauli Shuk Sarahna, del campo de refugiados de Dheisheh, detenida desde 23.05.2002, madre de dos hijos (cadena perpetuas). 9 Qahira Said Ali As-Sa’di, de Jenín, detenida desde 30.05.2002, madre de cuatro hijos (3 cadenas perpetuas y 30 años). 10 Du’a’ Ziad Jamil Al-Jayyousi, de Tulkarem, detenida desde 06.06.2002 (3 cadenas perpetuas y 30 años, en aislamiento). 11 Latifa Mohammad Mahmoud Abu Thra’, de Nablus, detenida desde 12.09.2003, madre de siete hijos (25 años, en aislamiento). 12 Rima Riyad Hasan Daraghmeh, de Jenín, detenida desde 28.07.2004 (25 años). 13 Amal Fayez Mahmoud Jum’a, del campo de refugiados de Askar, detenida desde 05.09.2004 (11 años). 14 Mariam Salem Suleiman Tarabeen, de Jericó, detenida desde 24.01.2005 (8 años y 6 meses). 15 Wafa’ Samir Al-Bis, de Gaza, detenida desde 20.05.2005 (11 años, es aislamiento). 16 Wurud Maher Qasim, de At-Tira, detenida desde 10.04.2006 (6 años). 17 Futna Mustafa Khalil Abu Al-Aish, de Nablus, detenida desde 21.07.2006 (15 años). 18 Nada Ata Saleh Derbas, de Jerusalén, detenida desde 01.05.2007 (4 años). 19 Fatin Bassam Shafi’ Al-Saadi, de Jenin, detenida desde 08.05.2008 (4 años). 20 Sanabil Nabigh Sleiman Breek, de Nablus, detenida desde 22.09.2008. 21 Randa Mohammad Yousif Shahateet, de Hebrón, detenida desde 03.01.2009 (4 años y dos meses). 22 Khadija Kayed Taha Abu Ayyash, de Nazaret, detenida desde 22.01.2009. 23 Hana’ Yahya Saber Ash-Shalabi, de Jenin, detenida desde 14.03.2009 (detención administrativa). 24 Raja’Nathmi Qasem Al-Ghoul, del campo de refugiados de Jenín, detenida desde 31.03.2009 (detención administrativa). 25 Abeer Mahmoud Hassan Odeh, de Tulkarem, detenida desde 09.07.2009 (en aislamiento). 26 'Aisha Mohammad I'bayyat, de Belén, detenida desde 13.08.2009. 27 Nisreen Atef Hassan Abu Zeinah, de Tulkarem, detenida desde 18.08.2009. 28 Suad Ahmad Abdel-Ra’ouf Nazzal, de Qalqilya, detenida desde 22.08.2009. 29 'Aisha Ghneimat, de Surif, detenida desde 02.09.2009. 30 Sumoud Yaser Hasan Karajeh, de Ramala, detenida desde 25.10.2009. 31 Nili Zahi As’ad As-Safadi, de Nablus, detenida desde 11.11.2009. 32 Muntaha Khlaid Rashid Al-Tawil, de Ramala, detenida desde 08.02.2010, madre de cuatro hijos (detención administrativa). 33 Shireen Tariq Al-'Isawi, de Jerusalén, detenida desde 21.04.10 (en aislamiento). 34 Rawan Hasan Abdallah Thawabteh, de Abu Dees, detenida desde 08.08.2010. 35 Alia Abdel Majid Al-Muhtasib, de Hebron, detenida desde 12.03.2010, está en malas condiciones de salud. 36 Kifah 'Awni Jibril, de Ramala, detenida desde 01.08.2010, madre de dos hijos (en detención administrativa).

Linan Yousif Abu Ghalmeh y su hermana Taghreed, de Beit Fourik, fueron detenidas el 15.07.2010. No está claro si siguen detenidas o fueron liberadas. Todavía hoy, 17.08.2010, las fuerzas israelíes de ocupación detuvieron a Ayat Nasir Abu Markhiyyeh de Hebrón.

Además de las presas palestinas en las cárceles israelíes, la entidad sionista encierra los cuerpos de siete palestinas mártires:

1 Dalal Said Mohammad Al-Mughrabi, asesinada el 11.03.1978 2 Darin Abu Eisheh, de Jenín, asesinada el 17.02.2002 3 Zeinab Isa Abu Aalim, del campo de refugiados de Askar, Nablus, asesinada el 22.04.2004 4 Hanadi Tayseer Abdel Malik, de Jenin, asesinada el 04.10.2003 5 Wafa' Ali Khalil Idris, del campo de refugiados de Al-'Am’ari, Ramallah, asesinada el 21.01.2002 6 Ayat Mohammad Lutif Al-Akhras, del campo de refugiados de Dheisheh, Belén, asesinada el 29.03.2002 7 Hiba Azim Daraghmeh, de Toubas, asesinada el 19.05.2003

martes, 5 de julio de 2011

A 154 años de su nacimiento: Clara Zetkin...

Por: Elena Ibarra
http://generoconclase.blogspot.com/2011/07/154-anos-de-su-nacimiento-clara-zetkin.html


Compañeras y compañeros, antes de iniciar mi informe sobre las actividades de la International de la Mujer de la Secretaría y el desarrollo de la actividad comunista entre las mujeres, me permiten comentarios cortos. Son necesarios porque nuestro trabajo está siendo incomprendido no sólo por nuestros adversarios, sino incluso por nuestros propios compañeros. Esto es con algunos restos de un antiguo punto de vista, y con los demás que es el prejuicio deliberado, ya que no simpatizan con nuestra causa, e incluso en parte se oponen a ella. (1977:22)

Con estas palabras críticas y aleccionadoras, parte del discurso pronunciado por la camarada Clara Zetkin, como representante de Alemania ante el Comité Ejecutivo de la Secretaria Internacional, en el IV Congreso de la Internacional Comunista celebrado en noviembre de 1922; quiero comenzar este pequeño homenaje a quien tal día como hoy, un 5 de julio, por allá por 1857, abrió sus ojos al mundo, en la población de Wiederau (Sajonia); Clara Eissner, quien años más tarde tomaría el apellido de su primer esposo Ossip Zetkin, y sería conocida por el mundo como “Clara Zetkin”. A sus 154 años de su nacimiento.

Esta invalorable mujer, quien con apenas 17 años finaliza sus estudios para convertirse en profesora, es sin dudas una “adelantada a su época”, pues muchas de sus frases y luchas siguen teniendo vigencia, y ha sido y será por siempre un ejemplo a seguir, pues luchó de manera incansable por la igualdad social, los derechos de la mujer, entre ellos el derecho al voto, y la instauración del socialismo; ingresando años más tarde a las filas del Partido Socialdemócrata de Alemania hasta 1917, momento en que se inscribió en el Partido Socialdemócrata Independiente de Alemania (USPD), concretamente en su ala más izquierdista, la Liga Espartaquista, quien evolucionaria hasta convertirse en el Partido Comunista de Alemania (KPD).

Con Apenas 21 años (1878), se refugió en Zúrich, luego en 1882 se exilia en París, donde juega un importante papel en la fundación de la II Internacional; más tarde en 1899 se casa por segunda vez con George Friedrich Zundel, con quien permanece hasta 1928, Clara es madre de dos hijos; pero ello no le impide seguir luchando, y en compañía de estos sigue la lucha por sus idearios, hasta convertirse en una de las figuras más prominentes del ala izquierdista de la Liga Espartaquista, acompañada también por la siempre amada Rosa Luxemburgo, “La Rosa Roja”, otra revolucionaria inolvidable, por su compromiso y práctica social con y por las y los más pobres.

Pero hablar Clara Zetkin, esta combativa luchadora no es nada fácil, pues su lucha además de infatigable fue consecuente, conjugando perfectamente la teoría con la práctica como marxista militante, de allí que a continuación sólo señalaré algunas:

o Tuvo una destacada participación en el Partido Socialdemócrata Alemán, donde entre otras cosas, organizó su sección femenina.
o Entre 1891 y 1917, dirigió la revista Die Gleichheit (La igualdad), importante órgano oficial de la Internacional de Mujeres Socialistas; instrumento fundamental para incentivar el trabajo y concientización de las Mujeres a través de una férrea línea ideológica.
o Abordó los problemas que más afectaban a las mujeres, con un tono, fuerte, franco, atractivo y convincente, lo cual le permitió convertirse en la guía, necesaria para la organización de las mujeres y su participación en la vida política.
o En la Revista “La Igualdad”, nunca faltó un artículo en el que se denunciase la escandalosa explotación de las mujeres y se incentivase a romper con el orden establecido.
o Durante el II Encuentro de Mujeres Socialistas, realizado en Copenhague en 1910, alza su voz para proponer que se instaure un día en homenaje a las mujeres obreras, quienes habían luchado por exigir mejores condiciones laborales.
o Junto con Rosa Luxemburgo y Alexandra Kollontai consiguen la instauración del 8 de Marzo como “Día Internacional de la mujer”.
o A partir de 1914, año en que Alemania entró en la I Guerra Mundial, Zetkin colaboró con su amiga Rosa Luxemburg en actividades para detener la guerra.
o Fue encarcelada en varias ocasiones.
o Tras largas luchas encabezadas por esta heroína, se consiguió el derecho al voto femenino en 1918.
o En 1918 se convirtió en miembro del primer Comité Central del Partido Comunista, y lo representó en el Reichstag desde 1920 hasta 1932, aprovechando su última intervención para hacer un llamamiento a la unidad contra el auge de los nacional socialistas (nazis).
o En 1920, esta mujer inquieta y batalladora resultó electa presidenta del Movimiento Internacional de Mujeres Socialistas.
o En 1921 fue elegida para la presidencia de la III Internacional
o En 1933. Tras alcanzar Hitler el poder, se exilia a la URSS

Pero lo más admirable, es la vigencia de su pensamiento, tal y como se evidencia en las palabras emitidas en la International de la Mujer de la Secretaría y el desarrollo de la actividad comunista entre las mujeres, reseñadas en la cita con la cual iniciamos, de donde resaltamos: “nuestro trabajo está siendo incomprendido no sólo por nuestros adversarios, sino incluso por nuestros propios compañeros”; frase lapidaria, pues, en verdad, nuestro trabajo ha sido y aún es incomprendido, incluso por quienes blanden las banderas de la igualdad; olvidando que no existe igualdad, si persiste la desigualdad entre hombres y mujeres; ya Carlos Mark, decía que “el progreso social puede ser medido por la posición social del sexo femenino”; de lo que se deduce que no se realizará el salto cualitativo hacia al socialismo, mientras exista esa desigualdad.

Pero ello, no vendrá de la nada, se hace obligante, estudiar prepararse, con los escritos de Rosa Luxemburgo, Carlos Marx, Lenin, y todos aquellos teóricos y teóricas versados en el tema, incluyendo los de la misma Clara Zetkin, -que aun cuando no abundantes, fueron agudos y claros- literatura donde además nos posesionemos de la claridad teórica necesaria para entender que no puede existir socialismo, si persisten las desigualdades, recordémosla cuando decia: “…como persona, como mujer y como esposa, la mujer no tiene la menor posibilidad de desarrollar su individualidad. Para su tarea de mujer y madre sólo le quedan las migajas que la producción capitalista deja caer al suelo”, por lo que producto de las sociedades patriarcales, hombres y mujeres, pero mayoritariamente las mujeres, vivimos en estado de opresión, del cual tal y como lo afirmaba Clara Zetkin, sólo podremos salir a través de la instauración de una sociedad de iguales.

Las sociedades capitalistas nos han demostrado que las mujeres sólo somos objetos de uso e intercambio y como todo objeto, tenemos períodos de caducidad, es decir somos útiles en determinadas edades, en aquellas edades productivas para ellos, una sociedad donde a partir de los 40 se les considera obsoletas e inútiles, y entre 15 y 39 atractivas como hembras, “mulas de carga”, u “objetos de venta”. Una Sociedad Capitalista donde lamentablemente no somos seres humanos, somos objetos, y con esta visión alienada, alienan a nuestros compañeros de lucha, a los hombres, generando rencillas entre ambos, cuando la lucha no es con ellos, es con el sistema capitalista, lo cual nos lleva organizarnos y lograr lo que con gran claridad señalaba Lenin: “Debemos por todos los medios crear un poderoso movimiento internacional de mujeres sobre una base teórica clara” (1920:1).

Han pasado 34 años desde aquel 1977, cuando Clara Zetkin pronunció aquellas palabras, parte de la cita con la cual iniciamos; y aún hoy la lucha por la defensa de nuestra posición en el mundo se hace cada día más vigente, pues seguimos palpando los vestigios de esa desigualdad e incomprensión por nuestra lucha, evidentemente producto de que no hemos alcanzado los objetivos, entendemos que algunas veces vivimos francos adelantes, otras veces grandes retrocesos, esa es la dialéctica, pero no podemos abandonar la lucha, ni la crítica y la autocrítica, no nos lo perdonaría la historia; tenemos el ejemplo de lucha incansable de mujeres como Clara Zetkin, para seguir adelante, forjando el camino de la justicia social y la equidad de género.

Dra.

Una Comunista

Fuentes

Zetkin, Clara, La cuestión femenina y la lucha contra el reformismo, Barcelona, Anagrama, p. 104.
_________ (…) Lenin sobre la Cuestión de la Mujer. Recuperado el 01 de julio de 2011. en http://www.marxists.org/archive/zetkin/1925/lenin/zetkin2.htm.
Lenin, V. I. (1972) Obras Completas, 4 ª Edición Inglés, Vol. 13, pp. 82-93. Traducido del ruso por Bernard Isaacs. Editado por Clemens Dutt.
Allendorf, Marlis.(1977). “La Mujer en el Socialismo”. Selección y extractos del texto.

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PERU: ¿Qué opinas de la "ordenanza gay"?

La alcaldesa de Lima, Susana Villarán, propuso una medida que obligaría a los sitios públicos a colocar un letrero que diga "esta ciudad y este local promueven la igualdad por identidad de género y orientación sexual".

La alcaldesa de Lima, Susana Villarán, encabezó este sábado "La marcha del orgullo gay" por diversas calles de la capital peruana.

"Como ciudadana acompañé la marcha del orgullo gay, como candidata también lo hice y ahora como principal autoridad participo de este desfile por las calles de Lima", dijo Villarán a la prensa.

"Saludo a la comunidad gay por los diez años de la marcha del orgullo gay", dijo al tiempo de rechaza todo tipo de marginación a las personas por el sexo, color, religión, creencia y otros.

La alcaldesa estuvo en uno de los carros alegóricos donde homosexuales vestidos con trajes de lentejuelas y colores bailaban al compás de ritmos modernos.

Unas 200 personas participaron del desfile que se inició en el Campo de Marte, unos subidos en carros, otros caminando y bailando, así como entregando preservativos a los transeúntes que aplaudían el paso de la colorida caravana.

La marcha culminó en medio de una gran fiesta en la Plaza Washington, frente a la Casa España de la Cultura, donde músicos, cantantes y bailarines el aniversario de la marcha.

El Movimiento Homosexual de Lima, la organización homosexual más antigua en funcionamiento de América Latina, consideró en una nota que "celebrar esta décima edición constituye un paso en el largo camino de la igualdad ciudadana".
  
AYACUCHO: Presentan proyecto de Ordenanza Regional sobre Igualdad y no discriminación por orientación sexual

Ruth Ramos activista lesbiana, señaló que
la desinformación y los prejuicios generan un 
conjunto de efectos nocivos para la persona y 
el ejercicio de sus derechos
La Mesa de Concertación de Lesbianas, Gays, Bisexuales y Trans (LGTB) de Ayacucho, pidió igualdad de derechos y oportunidades, en el marco de la presentación del proyecto de Ordenanza Regional en la Región Ayacucho

Frente a los diferentes casos de discriminación que se registraron en los últimos años en la comunidad homosexual, la Mesa de Concertación de Lesbianas, Gays, Bisexuales y Trans (LGTB) de Ayacucho, pidió igualdad de derechos y oportunidades, en el marco de la presentación del proyecto de Ordenanza Regional referida a la Igualdad y no discriminación por orientación sexual e identidad de género.

Es así que el proyecto presentado al gobierno regional el pasado 16 de julio y que será tratado en la próxima sesión ordinaria para su aprobación respectiva, tiene por objeto establecer un marco normativo que promueva la igualdad y evite la discriminación por orientación sexual e identidad de género en la región.

Al respecto, el presidente de la Mesa de Concertación LGTB de Ayacucho, Óscar Guillen Vilca, reveló que cotidianamente son discriminados desde el acceso a lugares públicos como restaurantes, además que son violentados física y sexualmente.

Las ordenanzas constituyen un importante primer paso para promover la igualdad de todos y así prestar mayor atención a los sectores más vulnerables, como es el caso de la comunidad homosexual, refirió.

Por su parte, Ruth Ramos activista lesbiana, señaló que la desinformación y los prejuicios y más aún en una sociedad conservadora como Ayacucho, generan un conjunto de efectos nocivos para la persona y el ejercicio de sus derechos.